Este día de las madres
no quiero flores,
tampoco regalos.
No quiero salir a comer,
ni que cocinen para mi.
Lo que sí quiero este día de las madres
es que mis hijos realmente me vean.
Que sepan que tengo defectos y miedos.
Que me equivoco al vivir.
Que en ocasiones
la incertidumbre del futuro,
su futuro,
mi futuro,
me inquieta.
En este día
quiero decirles que ser madre
no te vuelve ni mas santa,
ni mas lista,
ni mas buena.
Que ser madre
es la suma de mi historia,
mis defectos,
mis locuras y mis bondades.
Este día de las madres
quiero que sepan que
conservo,
procuro,
cuido
a la mujer que soy
de la misma forma que lo hago con ellos,
para que,
cuando quieran conocerla,
la encuentren viva,
plena.
Y así,
Un diez de mayo,
reencontrarnos
para amarnos
con compasiva sensibilidad.
