La cara de Gabriel cambió de la sonrisa amable que le dio al señor de la fila al entregarle su ticket, a una mueca de miedo y desesperación.
Gabriel intentó salir de la tienda, la chica de cabello color azul se plantó frente a la acera dispuesta a cruzar la avenida.
El autobús que iniciaba su recorrido a las 8:00 am salía a tiempo de la estación, el conductor sintió un dolor de pecho que no pudo controlar.
Gabriel no logró salir a tiempo. El conductor, a quien le empezó a fallar el corazón pisó el freno con rapidez. El señor de la fila fue testigo de cómo la chica de cabello azul bajó sus pies de la acera a las 8:00:04 de la mañana.
Cuatro historias de cuatro personas que cambiaron en cuatro segundos.
Fotografía: Elizabeth Lies