Existe un lugar privilegiado
donde habito en sororidad.
No temo a ser juzgada,
y mis palabras valen por lo que expresan.
No es un espacio físico,
pertenece a los dominios del alma,
donde mi espíritu se vuelve libre
y vuela con sus propias alas.
Allí donde la oscuridad de las sombras
se ilumina con la belleza de las letras,
donde la esperanza se presenta
en forma de prosa o poema.
Un lugar donde no hay máscaras
y no existe el miedo a llorar
es donde la vida trasciende
compartiendo en comunidad.
La gratitud se vuelve eterna
por la bendición de ser escuchada
en este lugar común de palabras y letras.
Mi voz no volverá a ser callada.
7 comentarios
Añade el tuyo →Que bonito Lume, a seguir escribiendo que nos encanta leerlas
Muchas gracias por leer !!!
Un lugar tan suyo que hacen que sean nuestro!!
Bienvenida seas !!! Gracias por leer!!
Tu estilo sencillo y directo me gusta. Muchas felicidades.
Gracias por compartir.
Gracias a tí por leer !!!
Me encantó Macri, bello.